Localización Finca El Carabal
Finca El Carabal
En el año 1.989, D. Antonio Banús Ferré, adquiere la finca El Carabal, situada en las estribaciones de la sierra de Guadalupe, dentro del término municipal de Alía, en la provincia de Cáceres.
Desde ese momento, el objetivo primordial fue el de acondicionar y mejorar la finca, ya que hasta entonces se había explotado de manera tradicional.
La finca cuenta actualmente con 350 hectáreas de plantación de encinas y alcornoque, y un vivero de especies forestales y ornamentales, para autoconsumo. Además, cuenta con un olivar de más de 6.000 pies que se explota de forma tradicional.
Tanto por parte de la propiedad como de los técnicos y el personal de campo, existe una verdadera preocupación por hacer de la finca una explotación modélica, que compagine los criterios productivos y de viabilidad con un respeto absoluto por el medio natural y las especies, tanto vegetales como animales, que en él se encuentran.
La Bodega Carabal y el Vino
La bodega Carabal nace del afán de evolución y la ilusión por iniciar actividades relacionadas con el sector agroforestal, bajo un punto de vista de viabilidad técnica, económica, ecológica, y el permamente uso del "sentido común". Nuestro proyecto de bodega se basa en la producción, en la propia finca, desde la cepa hasta la botella, de un vino extremeño de calidad. El objetivo, gracias a los tres vinos muy diferenciados entre sí que producirá la bodega, es posicionarnos entre los mejores vinos en cada una de las categorías.
La inspiración de este nuevo proyecto proviene del convencimiento de conseguir la ansiada proyección nacional de los vinos de Extremadura, ya que estamos seguros de que son susceptibles de competir ventajosamente con los producidos en otras regiones españolas de reconocida calidad.
Entre los años 2.003 y 2.006 se plantaron 52 hectáreas de la finca, utilizando distintas variedades de uva como Syrah, Cabernet Sauvignon, Tempranillo y Graciano, clones, portainjertos y marcos de plantación, resultando un verdadero campo de experimentación con 35 parcelas diferenciadas.
El terreno se ha dividido en tres zonas, cada una de ellas destinada a producir un vino distinto. En cada una de ellas se han escogido las variedades y su reparto porcentual, la capacidad de producción del clon, la densidad de plantación y el marco, incluso el manejo será distinto, para producir así el vino deseado.
Los vinos de la Bodega Carabal
Son vinos muy sanos y maduros, con un perfil moderno, donde prevalecen los caracteres frutales sobre los de la madera de su crianza, sabrosos y potentes pero elegantes, y con una personalidad diferenciada.
Prevemos que el gran éxito de la bodega Carabal estará en la elección de sus variedades y el manejo del viñedo. Los vinos de la región, por su clima extremadamente cálido, son vinos alcohólicos y planos, con poca acidez.
En la bodega Carabal hemos seleccionado variedades de ciclo largo y se han conseguido maduraciones largas y completas gracias a un singular manejo de la vegetación y del agua, unido a unas elaboraciones impecables gracias a los modernos medios de los que disponemos.
La bodega está acogida a la Denominación de Origen Ribera del Guadiana. Sin embargo, en el futuro, esperamos conseguir una denominación de origen propia o de Pago.
Producción de la Bodega Carabal y otros datos de interés.
En cuanto a aspectos técnicos, destacar los siguientes:
- Recepción en bodega con mesa de selección de recimos y de grano.
- Intercambiador de frío para bajar la temperatura de la vendimia.
- Depósitos de acero inoxidable de 3,6,10 y 20 mil litros de capacidad, con camisas para el control de temperatura y sistema de inertización con nitrógeno.
- Nave con control para fermentación maloláctica en barrica.
- Naves climatizadas de crianza en barrica y en botella.
- Disponemos, actualmente, de 230 barricas de roble francés y 30 de roble americano.
Sala de Barricas
Los vinos
Rasgo y Carabal
Rasgo
Carabal
El proyecto arquitectónico.
La bodega tiene una superficie de 8.500 m2, y está organizada en dos zonas principales: la industrial, y la social.
La zona industrial está dedicada a la manipulación de la uva, y otra zona social, dedicada a los trabajos de gestión y comercialización del vino, así como a la acogida de visitantes. Todos los espacios se conciben en relación directa con el paisaje, pudiendo disfrutar del mismo a través de grandes huecos y ventanales consiguiendo que el paisaje forme parte del edificio.
La zona industrial se compone de una gran nave de fermentación, una sala de envejecimiento en barricas, una zona de envejecimiento en botellas, una sala de embotellado y una de lavado de barricas, junto con todos los almacenes y cuartos de instalaciones necesarios para el proceso.
La zona social está formada por el laboratorio, donde se analiza la calidad del vino, las oficinas de dirección y comercialización, así como las zonas de restaurante de uso interno, para eventos propios de la bodega, zona de cata de vinos para dar conferencias y cursos de cata, zona de exposición, tienda y sala multiusos, que hacen de esta bodega un edificio moderno, dinámico y de gran interés gastronómico, cultural y de ocio.
En el interior de las zonas sociales se ha colocado una tarima sobre rastreles de madera de fresno combinada con con un pavimento de microcemento, los paramentos verticales se han pintado con pintura plástica y se han dejado zonas con los muros de hormigón visto y muros revestidos de acero corten.
En la fachada se han empleado materiales y tonos que imitan los colores de la tierra del lugar. La nave industrial está realizada en hormigón visto teñido y los volúmenes que acogen las zonas sociales están revestidos en acero corten.
Equipo Humano
La dirección de la bodega corre a cargo de Manuel Arias-Paz, con una trayectoria empresarial destacada en el marco de la gestión de bodegas durante más de 18 años.
En la colaboración de asesores externos, cabe destacar la asesoría en viña de José Ramón Lissarrague, ingeniero agrónomo y master en viticultura y enología; y en bodega de Ignacio de Miguel Poch, enólogo con 20 años de experiencia y especializado en proyectos novedosos creados desde cero.
Respecto al personal actual en Bodega: contamos con 1 Enólogo, Ingeniero Agrónomo, Master Enología y Viticultura; y 1 Ayudante Enólogo/Bodeguero.
Respecto al personal en viña, podemos decir que los dos momentos puntuales de labor en viña son la vendimia, y la poda y atado. Para ambas labores se necesitan entre 10 y 15 personas, entre personal fijo y eventual.
Finca El Carabal
Carretera Alía-Castilblanco, Km.10.
10137 Alía (Cáceres)